Amor y control

Amor y Control by josefernandogil

Este es un discurso dado por el concejal José Fernando Gil Moscoso, candidato a la Alcaldía de Cali, por motivo del Día del Padre. Junio 13 de 2011. 

Familias de Verdad

Este 15 de mayo, por disposición de la Organización de las naciones unidas se celebra a nivel mundial el día internacional de la familia y recogiendo las frases de Ban Ki-moon, su Secretario General, es necesario que «tomemos la determinación de apoyar a las familias para que alimenten a los jóvenes, cuiden a los ancianos y fomenten comunidades fuertes basadas en la tolerancia y la dignidad para todos.
 
Con todo respeto considero que la consigna debe convocar mucho más que el apoyo, debe concitar en nosotros dos compromisos: En primer lugar el de su  recuperación, porque debemos reconocer con dolor, pero con responsable decisión de corregir el rumbo, que como líderes y gobierno, directa o indirectamente, hemos participado de su debilitamiento.

Hoy cuando estamos sufriendo el acoso permanente de la delincuencia, la intolerancia, la corrupción y tantos otros flagelos, es un imperativo volver nuestros ojos, corazón y esfuerzos hacia la familia caleña, como una institución de fundamental importancia, porque es a partir de allí que podemos recuperar por completo nuestra comunidad, construir saludables relaciones, formar ciudadanos de bien, cambiar la mentalidad de los caleños hacia los trascendente, impulsar el buen vivir, la productividad y el desarrollo individual y colectivo.
 
Y en segundo lugar de su fortalecimiento, partiendo una defensa firme contra todos aquellos factores sociales y económicos que la agreden permanentemente, favorecen su desintegración y generan una escalada de violencia intrafamiliar producto del desespero y el no futuro,  e impulsando su desarrollo integral.
 
Es necesario que en Santiago de Cali desarrollemos Hogares Autosuficientes, brindando oportunidades de ingreso a los padres y a los hijos un proceso formativo integral, apuntándole a una nueva mentalidad: la productividad en cambio de la subsidiaridad. Ello obliga a realizar estrategias de mejoramiento integral del hábitat inmediato de la familia: De la vivienda, la infraestructura urbana, los servicios públicos y el medio ambiente.
 
Como también es impostergable que las nuestras sean Familias Unidas,  y para lograrlo es necesario el ejercicio efectivo de la paternidad en los hogares caleños en la trilogía: provisión, orientación y control para los hijos.  La construiremos unidad familiar cimentada en la espiritualidad, dándole a Dios el primer lugar, en el afecto, en la promoción de un ambiente de fraternal y solidaria convivencia con el objetivo de alejar a nuestros jóvenes de la drogadicción y la delincuencia, e impulsar su resocialización y sana convivencia en la comunidad.  
 
En ultimas, es imperativo que como gobierno y sociedad, sentemos las bases, generemos las oportunidades y condiciones sociales y económicas para que las de Santiago de Cali sean Familias de Verdad, creyentes, responsables, virtuosas, solidarias y  a la vez tengan un óptimo desempeño para enfrentar los desafíos del presente y los retos del desarrollo, sin perder su esencia,  porque no existe ninguna institución  tan idónea como ella para la humanización de las personas.

¿Quiénes son caleños de verdad?

La caleñidad es en esencia una mezcolanza fascinante y vigorosa de razas, familias y costumbres, reunidas en esta parte de la nación por razones de toda índole: desde el desplazamiento causado por la violencia que ha asolado el campo colombiano, hasta la búsqueda de mejores oportunidades para sobrevivir y levantar un hogar, ocurridas a lo largo de nuestra historia. 

Aquí hemos hecho de todo: desde lo más bueno, pioneros de la industria y el desarrollo; lo más grato, ejemplos de buena educación, cultura y civismo; lo más inspirador, le hemos dado lugar a una vigorosa espiritualidad centrada en Jesucristo que hoy convoca a cientos de miles de caleños; hasta lo más malo, porque también cuenta nuestra historia  que hubo quienes fueron condescendientes con el narcotráfico con su infame legado de sangre y miseria que aún nos toca. Perdimos la brújula en algún momento de nuestra historia, permitimos los malos gobiernos, la dirigencia pública y privada renunció a su empuje, al ciudadano común no le quedó otra alternativa que empeñarse en sobrevivir y de aquella Cali maravillosa de apenas treinta y cinco años atrás, sólo queda el recuerdo, una bonita leyenda que nuestros jóvenes escuchan con cierta incredulidad. 

Yo estoy convencido de que lo que nos sacó adelante y nos diferenció en el pasado, lo que les hacía sentir a nuestros compatriotas y extranjeros envidia de la buena, ganas inmensas de venir a Cali y querer ser como nosotros, aún está allí, y está a punto de salir a flote, para reivindicar la esperanza de que ésta volverá a ser una gran ciudad, integradora de la región, equitativa, moderna. Sólo hace falta un empujón de aquellos que como nosotros se consideren caleños de verdad.

Algunos Caleños de verdad nacen, otros llegan, todos se hacen en Cali y la aman entrañablemente.  Todos descubren la magia de Cali, se dejan envolver por ella y hacen parte de ella. Cali es incluyente, receptora, integradora y dinámica, es generosa. Esta tierra y su gente tienen un ambiente especial que a todos nos impregna de ganas y vigor para enfrentar las dificultades y superarnos.

Ser caleños es más que un gentilicio. Es una forma de vivir y encontrarse. Los caleños de verdad somos emprendedores, cívicos, responsables, pacíficos, familiares, creyentes, esforzados y valientes. Sabemos que Cali, no obstante su deterioro, es un pedazo de cielo en esta tierra, su sucursal, que clama por la manifestación objetiva, comprometida de todos nosotros para volver a ser el mejor vividero de Colombia.

A mí esta gran ciudad que me lo ha dado todo me convoca hoy a luchar por su recuperación. Me dio una familia, la de Edelberto el dentista del Porvenir, y Gloria la maestra de escuela, una educación en la escuela pública del edificio Venezolano y en los colegios de Santa Librada y el Politécnico, una carrera de Ingeniero Civil de la Universidad del Valle, dos especializaciones en la Icesi y Libre de Cali, me dio una esposa, Gloria Luz, otra caleña de verdad y un hogar con mis hijos José Fernando e Isabella.

Aquí aprendí a bailar salsa, a enviciarme con el chontaduro, el pandebono y la empanada, a sucumbir ante el encanto del sancocho valluno, a fascinarme de valle, la montaña y el cielo, a reír y a llorar, a ser quien soy. Aquí Dios me puso, me dio la oportunidad de conocerlo personalmente y creo que me tiene para cumplir un propósito útil.

Al postularme como candidato a la Alcaldía de Santiago de Cali, convoco a todos los caleños y caleñas de verdad, a todos los actores sociales, comunidades territoriales, líderes cívicos, organizaciones gremiales y sindicales, a integrarnos en una dinámica de rescate y salvamento de Cali.

Con Desarrollo económico con equidad, convivencia y calidad de vida en nuestros barrios y corregimientos y la recuperación y fortalecimiento de la familia, Cali volverá a ser el mejor vividero.

José Fernando Gil

Exitoso lanzamiento de campaña de José Fernando Gil

El día de hoy, el Concejal José Fernando Gil lanzó oficialmente su candidatura a la Alcaldía de Santiago de Cali a los medios de comunicación en una exitosa rueda de prensa, que tuvo lugar en el Hotel Dann Carlton.

"Estoy absolutamente convencido de que Cali puede ser un mejor municipio, en la medida en que haya un buen gobierno sirviendo a los Caleños.

Se ha llegado el momento de actuar, junto a mi equipo nos hemos unido a las filas del Partido de la U y bajo sus lineamientos imaginamos, planeamos y luchamos por nuestra hermosa ciudad, con una gran meta: alcanzar la Alcaldía de Santiago de Cali", afirmó el concejal y candidato.

José Fernando Gil es el candidato del sector cristiano de la ciudad, apoyado por los ministros cristianos más importantes de Cali, quienes también asistieron a la rueda de prensa. Igualmente, ha sido reconocido como uno de los concejales más preparados y con mayor conocimiento del municipio.

“José Fernando es un hombre bueno, un experto en los temas económicos de la ciudad, un hombre que permite a la ciudad avanzar en su desarrollo. Yo creo en usted, José Fernando, y por eso estoy aquí y al que cree todo le es posible y no sólo es posible que ganemos, sino que estoy seguro de que vamos a ganar” dijo en su discurso el Senador Roy Barreras.

Con la asistencia de medios de comunicación e importantes políticos de la ciudad como el Representante a la cámara Juan Carlos Martínez Gutiérrez, el Senador Roy Barreras, el ex Senador Ramón Elías López, el ex Concejal Carlos Urresty, entre otros, José Fernando Gil expresó que espera ser elegido candidato único a la Alcaldía de Cali por el Partido de la U, en la Consulta del próximo 29 de mayo y alcalde, el 30 de octubre del presente año.

Caleñas de Verdad

La verdad estuve buscando información sobre la mujer caleña y es bastante deprimente lo que uno obtiene a través de la internet. Quizás de las páginas menos agresivas, había una donde clasificaban las 10 mujeres caleñas más reconocidas: todas ellas jóvenes, lindas y exitosas más por su presencia física que por su contenido, esfuerzo y realizaciones.

En realidad no estaban allí las caleñas de verdad. Los slogan como las caleñas son como las flores o aquello de que son las mujeres más bellas de Colombia es parcialmente cierto. Porque la belleza de un Caleña de verdad no es la de la flor de un día, son los retos y desafíos que asumen y enfrentan  toda la vida, los que le confieren su verdadera y contundente belleza. Aquella que fascina, seduce e inspira…

¿Donde están las caleñas de verdad? Pocas veces en las revistas, en los magazines de la televisión, en las películas o en las páginas de los diarios. Casi siempre, o mejor siempre, en los retos de la vida cotidiana. Sí, las encuentro en mi casa, en mi oficina, en la iglesia o en la calle.

Las caleñas de verdad no son sólo jóvenes y de cuerpos torneados, son de todas las edades, de todos los tamaños, de todas las razas, las hay morenas, indias, blancas o en esa fantástica mixtura con la que nos bendijo el mestizaje.

Las caleñas de verdad son delicadas y a la vez poderosas. Una delicadeza que brota de su feminidad y un poder que sale de su gran capacidad de amar y entregarse a la causa de los suyos más que a su propia persona.

Las caleñas de verdad son frágiles y a la vez valientes, su valor, en mi caso, desafía mi flojera. Admiro y me inspira su capacidad de superar los más grandes inconvenientes, llegando incluso a negarse a su propio dolor con tal de buscar lo mejor para los suyos.

Las caleñas de verdad son discretas y a la vez evidentes. Poco les importa figurar, llegan incluso a cedernos el paso en la escalera de la popularidad, pero son contundentes y perseverantes a la hora de conseguir sus objetivos. Definitivamente prefieren el logro que la fama.

Las Caleñas de verdad son ligeras y a la vez Inteligentes. Los suyo es la sabiduría del día a día. La perspicacia que brota de su corazón y la clarividencia que fluye de sus ojos,  las confiere su gran capacidad de enfrentar el ahora sin paralizarse por rencores del pasado o los miedos del futuro.

A las Caleñas de verdad no le gusta competir pero son demasiado competentes. Privilegian el compañerismo a  la rivalidad. Para ellas son tan importantes las debilidades como las habilidades nuestras, en ambos casos las canalizan hacia el logro.

Las Caleñas de verdad son astutas y a la vez protectoras. Nos demandan protección para después protegernos. Nada mejor que sus abrazos y su regazo para encontrar refugio y aliento.

Las Caleñas de verdad tienen dudas y a la vez son las grandes heroínas de la fe. Han creído, creen y siguen creyendo a pasar de las enormes dificultades que es posible recuperar a Cali. Pero ese creer no es una declaración retórica, sino un compromiso que rubrican con su actuar del día a día.

Las Caleñas de verdad tienen una maravillosa capacidad de hacernos enojar y gozar, de dejarnos volar y aterrizarnos, de ser aguafiestas y llevarnos al éxtasis, de confrontarnos y consolarnos… de dispararnos y hacernos mantener en el viaje… Provienen de Dios no hay duda.

¿Nacieron aquí? No necesariamente, pero les puedo asegurar que se hicieron aquí. Surgieron de esta caleñidad impregnada de satisfacciones y dificultades.

Sí, las veo atravesando calles, llevando un hijo en el vientre y otro de la mano con gran dignidad y honor; amamantando mientras le ponen el pecho, o mejor, los pechos a la brisa. Responsables y dedicadas como sólo ellas pueden y suelen ser, prefiero mil veces verlas modelando en la vida cotidiana con todas sus dificultades, que en las páginas de las revistas ligeras de ropa. Porque allí, en el claustro, en la casa, en la calle, en la oficina, en la empresa, es donde muestran la más grande y contundente belleza, la de su enorme capacidad de vivir y convivir muchas veces, a pesar de nosotros los hombres…

Las Caleñas de verdad desean sacar la cara por esta ciudad, por sus barrios, por toda la comunidad caleña: son indispensables para llevar a cabo mi programa de gobierno para la Alcaldía de Santiago de Cali.

Si estás leyendo este mensaje es porque eres una preciosa Caleña de Verdad y por eso te deseo un feliz día, mes y año de la mujer.

Con aprecio,

José Fernando Gil Moscoso

Concejal y próximo alcalde de Cali